Seguro que te encantaría tomar siempre estupendas fotografías, conseguir imágenes que retengan al espectador y le cuenten algo, que le impacten de alguna forma. Pues sin duda la lectura fotográfica te ayudará 😉
No dudes que puedes crear buenas fotografías.
En cada disparo estás creando un mensaje, estás escribiendo visualmente. Otra cosa es que ese mensaje tenga sentido o sea el que buscas.
En tus fotografías tú eliges los parámetros de disparo, el punto de vista, el encuadre, etc. lo que determina qué aparece en tu imagen y cómo lo hace.
Hoy día, con la fotografía digital, es muy fácil hacer fotografías, incluso fotografías correctas, bien expuestas, etc.
Pero sigue siendo igual de difícil que siempre, conseguir buenas fotografías, esas imágenes que transmitan.
Ya que con cada fotografía estás creando, déjame que te haga una pregunta, si quieres escribir un libro, ser escritor, ¿qué tendrías que hacer antes, aprender a leer o a escribir?
Naturalmente, antes de aprender a escribir, debes aprender a leer.
Igual pasa con un compositor, antes tendrá que escuchar mucha música para saber qué le gustaría componer.
En tu caso, ¿le dedicas tiempo a leer fotografías? ¿sabes cómo hacerlo?
Saber leer mejor una imagen te ayudará a crear mejores fotografías.
En este artículo quiero darte unas pautas que te ayuden en el proceso de lectura, para que de forma consciente puedas interpretar mejor las imágenes.
En el Podcast 60 sobre el lenguaje visual ya hablé de algunos aspectos que voy a comentar en este artículo, donde además propuse un ejercicio a partir de un texto, aquí puedes ver las fotografías resultado del ejercicio.
¡A leer imágenes! 🙂
Por qué aprender a leer fotografías
Hoy día nadie puede imaginar un mundo sin imágenes, sin fotografías.
La fotografía digital e Internet han traído una explosión de imágenes, y aunque la mayoría sean banales, no hay duda de que las imágenes son imprescindibles para nuestra forma de comunicarnos, de aprender y analizar el mundo que nos rodea.
Nuestro cerebro recuerda antes las imágenes que los textos, las imágenes llegaron a nosotros antes que el lenguaje verbal.
Cierra los ojos y piensa en una manzana.
¿Qué te ha venido a la mente antes la imagen de una manzana o la grafía del texto “manzana”?
Estoy seguro que la imagen ¿verdad?
Así con la mayoría de elementos y conceptos que conocemos.
Por lo tanto, parece lógico que nos preocupemos por entender qué hay detrás de una imagen, cómo se lee, cómo se decodifica e interpreta y qué nos aporta.
¿Qué te puede aportar en lo fotográfico aprender a leer mejor las imágenes?
Lo primero es disfrutar más ampliamente de las fotografías e imágenes que ves.
Sabes que te suelo recomendar conocer la obra de otros fotógrafos, que te sirvan de inspiración y puedas ver cómo se expresaron y se expresan otras personas a través de la fotografía.
En concreto, creo que es muy enriquecedor conocer la obra de los grandes maestros clásicos de la fotografía.
El problema es que cuándo nuestra cultura visual y nuestro conocimiento del lenguaje visual no son muy amplios, la lectura de estas fotografías no es especialmente sencilla, porque emplean recursos visuales no tan aparentes.
Y lo segundo, como ya te he comentado, aprender a leer mejor imágenes te permite aplicar ese aprendizaje en tus propias fotografías.
Si poco a poco, vas aprendiendo a interpretar mejor las fotografías, las ajenas y las propias, irás viendo cómo funciona el lenguaje visual, un lenguaje complejo, nada trivial.
Ese aprendizaje es algo que aplicarás después en tu escritura, en el acto creativo de realizar tus fotografías.
Recuerda:
[bctt tweet=»Aprende a leer fotografías, para escribir/crear mejores imágenes ;)» username=»theimagen»]
Este aprendizaje no es obligado, pero sin duda te ayudará.
De igual forma que no es necesario ser un gran cocinero para disfrutar de un buen plato de comida o un Sumiller, para disfrutar de un buen vino, para conseguir buenas fotografías, no es un requisito imprescindible saber leer imágenes.
Como dice la diseñadora y profesora Donis A. Dondis en su estupendo libro “La sintaxis de la imagen”: no necesitamos ser visualmente cultos para hacer o entender mensajes visuales.
Pero ese conocimiento, en cualquier caso, te dará una perspectiva más amplia, y te hará disfrutar más profundamente de las imágenes, y usarlo en tus creaciones 🙂
Lectura, análisis y valoración de una imagen
Cuándo se habla de interpretar una imagen, es posible hacerlo desde distintos acercamientos.
Al menos, creo que podríamos encontrarnos con estos 3 términos relacionados con la interpretación de la imagen: lectura, análisis y valoración.
Me gustaría distinguir mi interpretación de estos términos para acotar el sentido de este artículo.
Lectura
El término lectura de una imagen es usando de una forma bastante amplia, pero aquí con lectura me refiero a la acción de ver e interpretar una imagen digital o impresa, separada de cualquier información adicional, como puede ser el autor, el contexto histórico, la cámara utilizada, etc.
Digamos que la lectura es el hecho perceptivo e interpretativo sólo de la imagen, separada de todo lo demás.
Analizar
Analizar una fotografía muchas veces se utiliza como sinónimo de la lectura.
Sin embargo, otras veces tiene un sentido más amplio, en el análisis de una imagen, se podría tener en cuenta cualquier factor que haya influido en la imagen o nos aporte información relevante: su autor, título de la obra, dispositivo de captura, el contexto social y cultural, el momento histórico, técnicas usadas, etc.
Así, analizar una imagen en ese sentido, además de su lectura, supone un estudio mucho más exhaustivo de todo lo relacionado con la misma.
El análisis de una imagen, puede aportarnos información que puede cambiar completamente la lectura o interpretación inicial de una imagen.
Valorar
Por último, podemos intentar interpretar una imagen con la intención de valorarla.
La pregunta podría ser ¿Cómo de buena es una imagen?
Pero para poder hacer esa valoración, se necesita de unos criterios de valoración.
¿En base a qué una fotografía es buena? La valoración dependerá por tanto de los criterios.
Esa valoración puede tratar de discernir si esa imagen sigue unos determinados valores compositivos, estéticos, expresivos, etc. concretos, que siempre son percibidos y estimados por una determinada persona.
Por tanto, toda valoración es subjetiva, añade más subjetividad a la propia de la lectura, ya que depende de la interpretación de los criterios.
Por ejemplo, se puede valorar una imagen para un concurso fotográfico o de cara a hacer una crítica de fotografías propias o ajenas.
Muchas veces me piden valorar una imagen para discernir si una imagen es buena o mala, qué fallos tiene, etc.
Hacer esos juicios de valor no es algo sencillo por varios motivos:
- La valoración debería hacerse en base a unos criterios fijados previamente
- De cada a interpretar los posibles errores en una fotografía, tendríamos que conocer la intención del fotógrafo. Porque ¿un horizonte caído es un error? ¿un elemento desenfocado es un error? ¿una cabeza cortada es un error? Lo de desde mi punto de vista dictará qué es un error o no, es la intención del fotógrafo.
En este artículo me voy a centrar únicamente en la lectura, en la interpretación de una imagen sin información adicional, algo que ya de por sí es bastante complejo, jejeje 😉
Además, saber leer una imagen de forma correcta será el primer paso para poder hacer un análisis y una valoración de la misma, con más criterio 😉
Más adelante, ya habrá tiempo de tratar el análisis y la valoración de fotografías.
¿Qué leemos en una fotografía?
Ya que queremos aprender a leer fotografías, antes tenemos que saber qué es realmente una fotografía.
Parece una obviedad, pero ¿qué es una fotografía?
Según la Wikipedia: la fotografía es el proceso de obtener imágenes duraderas debido a la acción de la luz, y las fotografías son el resultado de ese proceso.
Hasta ahí bien ¿verdad? 😉
A partir de ahí, ver una imagen e interpretarla parece algo bastante sencillo y obvio.
Todos tenemos la capacidad de interpretarlas, de reconocer en ellas algo que hemos visto antes en el mundo real o en otras imágenes ficticias.
Se puede creer que la lectura de imágenes es automática y, por lo tanto, no requiere ningún tipo de entrenamiento especial, de ningún aprendizaje.
Sin embargo, existen muchos tipos de imágenes que comunican cosas de formas muy variadas y usando recursos visuales muy diferentes.
¿Crees que la lectura de esta fotografía de Chema Madoz es automática?
La lectura es fácil ¿verdad? Un reloj con unas largas correas ¿o hay algo más?
Sí, hay más, de eso se trata 😉
Mediante la pintura, la fotografía, el cine, un grafiti o un cómic, tenemos acceso a imágenes que tienen muchos rasgos comunes, pero tienen sus peculiaridades y transmiten la información de forma distinta.
Además, existen muchos factores internos y externos que afectarán en la lectura, en la interpretación de las mismas.
En cualquier caso, la interpretación de una imagen no es algo tan trivial como se podría pensar en un principio.
En este artículo quiero desgranar en lo posible el complejo proceso que implica leer una fotografía. Desde los aspectos más conceptuales de qué es realmente una imagen, hasta la interpretación más amplia que se puede hacer de la misma.
La lectura fotográfica puede ser vista como un sistema de capas o niveles de interpretación que vamos a ir viendo.
Las miradas en una fotografía: fotógrafo y espectador
Continuamente estamos leyendo imágenes, pero ¿qué estamos leyendo exactamente?
Si nos ceñimos a fotografías, que es aquí lo que nos interesa, vemos una imagen que plasma la mirada de un fotógrafo sobre una escena.
Miramos lo que, en un determinado momento, el fotógrafo vio o quiso hacernos ver.
En toda fotografía hay al menos 2 miradas, la del fotógrafo y la nuestra, como observadores.
El fotógrafo tiene una percepción de la realidad, desde su propia visión. Y tú, como observador, tienes tu propia percepción de la realidad, tu propia visión.
Este proceso podríamos reflejarlo así:
En este esquema se puede ver el proceso que sigue una fotografía desde su concepción hasta su interpretación por el espectador.
Los pasos en este proceso van añadiendo capas de subjetividad que debemos considerar a la hora de interpretar una fotografía.
En el esquema se muestra en forma de cajas grises los filtros de imponen la cámara, el fotógrafo y el espectador.
En base a este esquema podemos acortar más claramente qué podemos esperar en la lectura de una imagen.
¿Qué nos muestra una fotografía?
Toda fotografía es un icono, es decir, es una representación de la realidad, no es la realidad misma.
Lo plasmó muy bien Magritte, el pintor surrealista belga, en su famosa serie de pinturas:
Esto no es una pipa, es la imagen de una pipa.
Pero aún vamos más allá, porque según el esquema anterior, una fotografía es la representación no de la realidad, si no de la particular mirada del fotógrafo sobre esa realidad.
Toda fotografía no es la realidad, sino la representación de una mirada sobre la realidad.
De esa forma, estamos lejos de interpretar la realidad al mirar una fotografía, estamos interpretando lo que supo, quiso y logró plasmar el fotógrafo de la misma.
Según el esquema anterior, la imagen ha pasado por el “filtro” de la cámara y por el “filtro del fotógrafo.
A partir de ahí, la lectura de una fotografía es nuestra particular interpretación de lo que logró plasmar el fotógrafo en una imagen.
Ahora bien, aunque de una imagen puede haber muchas lecturas o interpretaciones, igual que puede haberlas de un texto, nuestra “particular lectura” tiene muchas cosas en común con otras personas.
Digamos que todos tenemos un “Sistema Operativo visual” que hace que tengamos muchos puntos en común en el proceso de lectura con otras personas.
Lenguaje visual
En una imagen el fotógrafo captura algo que la cámara recoge y que se representa visualmente, utilizando el lenguaje visual.
El lenguaje visual, como todos los lenguajes, tiene su ambigüedad.
Es posible que incluso más que otros lenguajes porque es menos conocido, y no son o están ampliamente generalizadas y aceptadas sus “reglas” o principios de funcionamiento.
En el conocimiento por parte del fotógrafo del lenguaje visual estará su habilidad de plasmar de la mejor forma posible lo que quería transmitir en la imagen.
Y por otro lado:
Como observador, en tu conocimiento del lenguaje visual, estará la habilidad de interpretar esa imagen de forma lo más parecida posible a lo que quiso transmitir el fotógrafo.
En esas habilidades reside la capacidad comunicativa y expresiva de la fotografía usando el lenguaje visual.
Pero que te quede claro: en la interpretación y lectura de una imagen influye, por supuesto, tu conocimiento del lenguaje visual.
Leer una imagen: ver y observar
La lectura de toda imagen parte de acto de percepción visual y al que le sigue un proceso de observación.
La percepción visual es un proceso por el cual una persona recibe un conjunto de estímulos visuales a partir de sus ojos.
La interpretación de una imagen está en estrecha relación con la manera en la que cada individuo capta la realidad, sus vivencias personales, su educación, su contexto cultural, etc.
Leer adecuadamente una imagen exige observarla, es decir, mirar su contenido con atención y estudiar sus cualidades visuales y su significado: la luz, el color, interpretar la escena, los elementos que apareces, cómo interactúan, etc.
El tiempo de lectura
La correcta lectura de una imagen exige un tiempo de observación.
Hoy día, con la ingente cantidad de imágenes que tenemos acceso a través de Internet, se suele dedicar muy poco tiempo a observar detenidamente una imagen.
Esa observación puede aportarnos mucho más conocimiento del que suponemos y es la base de una buena lectura.
El maestro Óscar Colorado habla del minuto de oro, como ese tiempo mínimo que se merece la fotografía que quieres interpretar.
Como nos dice Óscar Colorado:
“No se trata únicamente de ver, sino de dejar que la imagen provoque sentimientos, reflexiones, ideas o pensamientos en ti.”
Mediante la observación, la contemplación de imágenes, puedes disfrutar más de la fotografía, y al tiempo, ir aprendiendo más sobre el lenguaje visual.
La cantidad de imágenes
La enorme cantidad de fotografías a las que podemos tener acceso hoy día a veces puede ser un problema.
Hay muchas plataformas y redes sociales de fotografía: Instagram, Pinterest, Flickr, 1x, 500px, etc. Hace un tiempo escribí un artículo sobre varias plataformas de fotografía para buscar inspiración.
Pero el tiempo es finito, ¿a qué imágenes vas a dedicar tu tiempo de lectura?
Toda imagen puede ser leída, igual que todo libro, si conocemos el idioma de escritura 😉 Pero como los libros, no todas las imágenes te van a aportar lo mismo.
Entonces, ¿cuál me recomiendas Braulio?
Pues seguramente, cuándo una imagen ha pasado el filtro del tiempo, ajena a los vaivenes de las modas, es un buen indicador de que es una imagen que transmite algo.
Así, las imágenes de los grandes maestros de la fotografía clásicos puede ser un buen punto de partida.
Sin desmerecer a los fotógrafos actuales que tengan una obra que te guste, sean más o menos reconocidos.
Eso sí, mi consejo es que es mejor ver menos imágenes, y leer/observar más.
Vamos, que dediques el tiempo de observación necesario a las fotografías que quieras interpretar correctamente, es un par de segundo no vas a percibir todo 😉
Proceso de lectura de una fotografía
Todo el mundo que mira una misma imagen están viendo lo mismo, si dejamos de lado nuestras diferencias perceptivas o ciertas anomalías visuales, como el daltonismo.
Sin embargo, el proceso de interpretación o lectura de una fotografía puede diferir mucho de una persona a otra.
Como ya te he comentado, podemos hacer un símil entre el lenguaje visual y el lenguaje escrito.
En este sentido, las palabras del lenguaje escrito poseen dos tipos de significado que influyen en su lectura, el denotativo y el connotativo.
La palabra “amanecer” tiene un significado denotativo: La parte del día correspondiente a la salida del sol. Así es como se define en los diccionarios.
Sin embargo, para una determinada persona puede llevar adheridas ciertas connotaciones, como el significado subjetivo de «comienzo de una nueva vida», «esperanza», etc.
En la lectura fotográfica pasa lo mismo., cuándo haces una lectura de una imagen, haces una lectura denotativa y otra connotativa de la misma.
La primera es una etapa más óptica y física, y la segunda más interpretativa.
Veamos estas dos partes de nuestro proceso de lectura visual.
Denotación
Cuándo vemos una imagen obtenemos un estímulo visual a través de nuestra vista, que es transmitida al sistema nervioso central y al cerebro.
Comienza la primera etapa en la lectura: la denotación.
Es la primera etapa en la lectura, es lo que vemos literalmente en una fotografía, los elementos que la componen: las personas, objetos, lugares, etc.
Aquí también se incluyen aspectos básicos de la imagen en los que reparamos más fácilmente los fotógrafos: formato de la toma (vertical u horizontal), encuadre, uso o ausencia del color, elementos compositivos, etc.
Para captar este primer nivel de lectura, parece que solamente se requiere la percepción, porque se trata de enumerar todos estos elementos sin valorar u opinar acerca del significado que nos sugieren.
Sin embargo, vamos algo más allá, y realizamos una identificación, una relación entre significante y significado.
Vemos un perro y lo identificamos como tal. Pero si hay un objeto desconocido, es un elemento extraño que no sabemos asociar a nada y no identificamos.
En este nivel de lectura nos ajustamos de manera literal a lo que nos es mostrado, pero ya hay un cierto análisis o interpretación.
Así, podríamos decir que la denotación supone una lectura bastante “objetiva”, común a todos los observadores, o por lo menos, a la gran mayoría.
Aspectos que cualquier persona puede leer en esta etapa:
- Descripción del contenido de la imagen: objetos, personas, acciones, escenarios, textos…
Y como fotógrafos podríamos añadir elementos de lectura, observando:
- Elementos visuales usados: puntos, líneas, formas, luz, color, etc.
- Aspectos compositivos o expresivos: encuadre, ángulo de la toma, profundidad de campo, centro/s de interés, contraste, simetría, ritmo, movimiento, …
- Cualidades de la imagen: también podemos llegar a percibir si una imagen es figurativa o abstracta, simple o compleja, original o redundante, etc.
- Disciplina de la fotografía
Hasta aquí, digamos que hay una interpretación muy documental de la imagen.
Las preguntas que te puedes hacer en la denotación son:
¿Que veo en la imagen?
¿Qué cuestiones fotográficas podría indicar?
En resumen: la primera lectura de una imagen es la denotativa, donde reconocemos los elementos de la escena e intentamos dar un primer significado bastante literal de la escena.
El orden de lectura y su importancia
En esta primera lectura de la imagen, hemos observado el contenido de la imagen y hemos realizado una primera interpretación.
Pero no hemos visto la imagen de cualquier forma, si no que hemos seguido unos patrones de lectura.
En el anterior artículo del Blog te hable sobre la psicología Gestalt y sus leyes de la percepción visual.
Estas leyes o principios se basan en que existen una serie de patrones en nuestra percepción, comunes a la mayoría de nosotros.
Por lo que esta primera lectura está condicionada por nuestra forma subconsciente de interpretar lo que vemos.
Por ejemplo, queramos o no, la mirada siempre busca la luz, va antes a las zonas más iluminadas, las zonas enfocadas reciben más y antes la atención que las desenfocadas, las líneas conducen la mirada, etc.
Intentando conducir la mirada y usando los recursos visuales adecuados, centrarás el interés en las partes que quieres y facilitarás la lectura de tus imágenes.
De esa forma, el espectador necesitará menos tiempo de lectura y puedes transmitir mejor tu mensaje.
Connotación
En esta segunda etapa de lectura interpretamos los elementos que vemos en la fotografía, las ideas asociadas sugeridas por la imagen, pero que no están denotadas de forma directa o explícita.
En esta etapa se trata de dar respuesta a preguntas como ¿Qué interpretas de esa fotografía? ¿De qué trata? ¿Qué te provoca?
La connotación supone la lectura subjetiva de la imagen, una interpretación particular y personal de la misma, que viene dada por nuestra manera particular de ver las cosas, nuestro conocimiento y nuestras experiencias previas, nuestro estado de ánimo, etc.
Aquí entramos en arenas algo movedizas.
Dependiendo del observador, de la persona que ve una determinada imagen, una imagen tendrá una lectura u otra.
Las preguntas que te puedes hacer en la connotación son:
¿Qué me hace sentir la imagen?
¿De qué podría estar hablando?
Roland Barthes denominó “polisemia” la capacidad de la fotografía de generar significados múltiples. Y en su libro “La retórica de la imagen” afirmaba:
Toda imagen es polisémica; implica… una “cadena flotante” de significados, entre los cuales el lector puede elegir algunos e ignorar los otros. Roland Barthes
En la denotación identificamos un perro que aparece en la imagen, pero ahora en la connotación, para una persona que haya sufrido el ataque de un perro alguna vez, tendrá connotaciones distintas de quién no haya pasado por esa mala experiencia.
La misma imagen, el mismo sujeto, provocará sensaciones e interpretaciones distintas.
Todo esto que puede sugerir la imagen es la “connotación”.
En las asociaciones de esta segunda lectura, tendrán un peso muy importante: la experiencia previa de cada persona, sus gustos personales, su cultura general, su cultura visual, el contexto, el estado anímico, etc.
En este experimento de Canon, fíjate cómo nuestro conocimiento del lenguaje visual, según la experiencia fotográfica, también puede incluso cambiar los patrones de lectura de una imagen:
A mayor conocimiento visual más recorrido se hace en una imagen y más información puede suministrarnos.
De ahí que la lectura sea algo que se va consiguiendo y entrenando poco a poco.
Cuanto más conocimiento del lenguaje visual tengas, más detalles veras y mejores resultados obtendrás.
Pero no es algo que vamos a conseguir en muy poco tiempo.
Lectura y niveles de iconicidad de una imagen
Ya te he comentado que una fotografía no es la realidad, es una representación de la realidad.
En cualquier imagen según el grado de parecido que tiene con lo representado, si es alto, el grado de iconicidad de la misma es alto y si el parecido es bajo, su grado de iconicidad será bajo.
Naturalmente, no todos los medios de representación de imágenes captan el mundo exterior con el mismo grado de iconicidad.
Antes de la fotografía, la pintura realista era la que mayor grado de iconicidad tenía. Desde la aparición de las cámaras de fotos, la fotografía es un medio de representación con una gran iconicidad.
Los niveles de representación de la realidad o iconicidad de una imagen son 3:
- Nivel representacional. Se refiere a la experiencia visual básica, a lo que vemos y reconocemos en la imagen. El nivel de representación de la fotografía es muy alto, porque no sólo nos permite ver un pájaro, si no el detalle exacto de esa especie e incluso ese ejemplar. Según Donis A. Dondis: La cámara produce un informe visual de cualquier cosa que se produce frente a ella.
- Nivel abstracto. El siguiente nivel corresponde a la percepción de las fuerzas visuales elementales de una imagen, alejada de tanto detalle como vemos en el nivel representacional, en el que aparecen las formas básicas y la composición cobra protagonismo.
- Nivel simbólico. El último nivel de representación vendría dado por los significados asociados que pueden tener distintos elementos en la imagen o la imagen en sí. Los símbolos en una imagen tienen mayor impacto cuanto más compartidos o extendidos están por las personas. Todos conocemos símbolos que de alguna forma compartimos. Fíjate en las imágenes de abajo, dibujos abstractos de una paloma, pero el dibujo de la derecha para es un símbolo extendido de la paz:
Estos niveles de representación conviven en una imagen y seguramente no están completamente separados, si no que se solapan entre sí.
El nivel representacional es el que interpretamos en la etapa denotativa de la imagen, mientras que el nivel abstracto y simbólico corresponden más a la etapa connotativa que hemos visto.
Al leer una imagen es fácil quedarse en el nivel representacional, pero la lectura de la misma debería ir más allá.
Volvamos a la imagen del reloj del genial Chema Madoz:
Con tan pocos elementos el nivel representacional es escueto: un reloj y unas vías de tren en miniatura.
Hacer una abstracción de la imagen es quedarnos con los elementos visuales básicos, es como entornar los ojos y ver la imagen algo borrosa. Podríamos ver la imagen de una forma similar a:
Vemos un círculo y unas líneas gruesas que recorren la imagen. El círculo nos remite al movimiento, es una línea curva cerrada, sin principio ni fin, y las líneas curvas nos remiten también a algo que fluye, que se mueve.
Aunque no seas consciente estas formas y su interpretación es algo bastante interiorizado y generalizado, que compartimos la mayoría de personas.
En lo simbólico, vemos un reloj que simboliza el paso del tiempo y las vías del tren que nos remiten al viaje, a un trayecto.
En conjunto tenemos una fotografía cuyos sencillos elementos se pueden interpretar como una muestra del inexorable paso del tiempo, que nos evoca al viaje vital que es nuestra vida.
Al ver una imagen e intentar interpretarla, debes ir más allá de lo meramente representado, pensar en los elementos que la componen y lo que puede simbolizar cada uno de ellos.
Realizar una lectura adecuada de una imagen es una actividad perceptiva e intelectual, como decía el crítico de arte e historiador estadounidense Leo Steinberg:
[bctt tweet=»Entrena tu visión: “El ojo es parte de la Mente”. Leo Steinberg» username=»theimagen»]
Como ya explicaba en el artículo sobre la Gestalt, realmente percibimos la imagen como un todo que es mayor que la suma de las partes.
Algunas lecturas
Para poder ver de forma práctica este proceso de lectura, voy a comentarte el proceso de lectura de varias imágenes.
Con lo que te he contado hasta ahora, te aconsejo ver la fotografía y realizar tu propia lectura antes de leer mis comentarios 😉
Mira esta fotografía:
¿Conoces su autor? ¿El momento histórico?
En lo denotativo ¿qué ves?
Una mujer parece que llorando recostada en unos escombros o ruinas.
Algunos detalles más desde el punto de vista de un fotógrafo: es una imagen en blanco y negro lo que refuerza las formas y elimina distracciones, la mujer está bastante centrada, el punto de vista es bastante habitual, a la altura de los ojos, en una toma un poco en picado hacia la mujer, lo que la coloca en una situación más débil, la parte más iluminada está en la parte sobre la mujer, los escombros forman una línea base que dirige la mirada hacia el fondo, donde siguen las ruinas…
En lo connotativo ¿qué interpretas?
Haz el esfuerzo tú ¿eh?
Te cuento resumido lo que interpreto yo: la mujer parece que está llorando, sufre mucho, junto o sobre algo que ahora está en ruinas, la mujer me provoca desesperación, lamento… los restos parecen de algo grande roto, destruido y como no se alcanza a ver el final, parece que todo está derruido ¿Podría ser la imagen tras una guerra o conflicto armado?
Si no tenemos más datos, hasta aquí lo que a mí me ofrece la lectura de la imagen.
Ahora, realmente conozco esta imagen y sé que su autor es el gran fotógrafo Henri Cartier-Bresson, y que está tomada en 1945, en Dessau (Alemania), justo al acabar la Segunda Guerra Mundial.
Conociendo este contexto, la imagen adquiere una nueva interpretación.
No es solamente la imagen de una mujer individual desolada, este sería el nivel representacional, la mujer puede servir de símbolo de una Europa que logró salir adelante, tras la derrota de la Alemania nazi de Hitler, pero que en aquellos momentos estaba arrasada, hundida, que lo había perdido todo.
Fíjate cómo el conocimiento del contexto puede añadir cosas nuevas a la interpretación de una imagen. Volveré después sobre esto.
Vamos con otra imagen:
¿Qué ves?
En lo denotado vemos a un hombre, con semblante serio, parece que ajeno a nuestra mirada, que está en un parque o similar, por los árboles, la farola, etc.
Podemos añadir, que la imagen es en blanco y negro, el tono de la imagen es bastante oscuro, la persona descentrada, muy cerca de un borde, la farola parece torcida, aparece la línea de un camino que parece llevarnos a ninguna parte, con una composición compleja. Se ve un cielo también algo amenazante. Se podría decir que es un retrato, pero extraño.
Realmente parece una toma algo descuidada ¿verdad?
¿Qué te sugiere o provoca esa imagen? Piensa 🙂
Es una imagen con un blanco y negro duro, los tonos oscuros me sugieren una imagen cerrada, sombría, el hombre pegado al borde, donde su mirada nos saca de la escena con un gesto inquietante, la composición desordenada y el momento atmosférico, etc., me lleva a percibir la imagen con cierta tensión, cierta angustia, etc.
Hasta aquí lo que puedo sacar de la imagen, si no conoces al retratado.
¿Quién es esta persona? Pues es el pintor británico Francis Bacon, y la fotografía es del fotógrafo Bill Brandt, también británico.
¿Conoces las pinturas de este pintor? Sus pinturas hacen uso de la deformación pictórica y son bastante inquietantes y opacas.
¿No es eso lo que me transmite la imagen de Brandt? Quizás no sea una toma tan descuidada como parecía 😉
Y ahora mira esta otra imagen:
¿Qué ves? Describe la imagen.
Vemos a un grupo de jóvenes sentados charlando, parece que tranquilos, al lado de un río o un lago, y al otro lado, se ve una gran ciudad y una gran humareda que induce a pensar en un incendio. La imagen es en color, sigue una composición de tercios y por la luz, parece estar tomada un día soleado al mediodía.
En lo connotativo ¿qué te sugiere?
Recuerda, ¡piensalo antes tú! 😉
A mi esta imagen me da cierta intranquilidad, ya que, a pesar de la posición relajada de los jóvenes, la gran humareda me desconcierta. Incluso puede que sea al revés, me desconcierta la actitud de los jóvenes, quizás sepan que no pasa nada y ese humo no es nada grave o quizás no les importa nada lo que ocurre.
Si reconoces la silueta de la ciudad o el puente que se ve al final, el puente de Brooklyn, sabrás que la imagen es de New York. Este dato ya puede que sea suficiente para darte mucha más información para la lectura de la imagen.
La imagen es de 2001, justo cuándo se estaban produciendo los terribles ataques terroristas sobre la ciudad que cambiarían el devenir de la historia, y fue tomada por el fotógrafo estadounidense Thomas Hoepker.
La imagen, por sí sola, proporciona una lectura algo ambigua, ¿cómo interpretas la actitud de los jóvenes una vez que conoces los hechos que recoge?
No juzgues antes de tiempo, uno de los jóvenes de la foto dijo del momento: “a pesar de lo que muestra la imagen… estábamos profundamente afectados e incrédulos, … discutiendo acaloradamente sobre lo que acaba de suceder”.
Quizás estamos en los límites del lenguaje visual, percibiendo su ambigüedad.
Una persona puede leer e interpretar una cosa y otra persona, otra cosa distinta.
Continuemos indagando un poco sobre este tema 😉
Verdades y mentiras del lenguaje visual
La lectura de una imagen puede llevarnos a interpretar una cosa distinta a la que quiso mostrar el fotógrafo, si no hemos tenido el acierto de interpretarla bien o el fotógrafo no lo tuvo al intentar plasmar un mensaje.
Ya sabes que una fotografía no es la realidad, pero es que además, puede usarse para representar cosas que se ajusten o no a la realidad.
Mira esta imagen del fotógrafo estadounidense Jim Goldberg, que forma parte de una serie llamada «The Nursing Home«:
¿Qué te parece la imagen? Este par de simpáticos abuelos parecen unos amigos inseparables ¿verdad?
Pues después de hacer las imágenes, mostró a los retratados unas copias para que anotasen qué les parecían las mismas.
Uno de estos ancianos escribió:
“Parecemos amigos. Nunca hablo con él. No tenemos nada que decirnos. No hay nada que decir. No somos como esta imagen«.
¿Puede un mensaje visual llevarnos a engaño? Claro de puede.
En esta imagen la lectura no es especialmente compleja, el mensaje principal está bien elaborado, pero no tiene por qué ajustarse a la realidad.
En la lectura fotográfica no podemos llegar a interpretar con absoluta certeza como es la realidad que representa.
Recuerda:
En fotografía, muchas veces, las apariencias engañan. Aprende a leer imágenes para errar menos.
Texto vs Imagen
Otro aspecto interesante del ejemplo anterior: el texto añadido a la imagen.
Ese texto lo cambia todo ¿verdad?
Simplemente el «título» que le damos a una fotografía, ya nos puede estar dando pistas de cómo interpretarla.
Cualquier texto añadido a una imagen ayuda a crear denotación.
Por suerte o por desgracias, no es cierta la afirmación de que «una imagen vale más que mil palabras«, porque dependerá de la imagen y muchas no tiene la capacidad comunicativa y/o expresiva que pueden tener mil palabras.
Sencillamente son lenguajes distintos, que simplemente pueden complementarsen. Ambos los decodificamos e interpretamos de forma distinta y cada uno puede aportarnos cosas diferentes 😉
¿Fotografías buenas o malas?
Muchas veces me piden revisar y comentar fotografías de otras personas, generalmente personas que están aprendiendo para que les comente los errores.
Ya he comentado que valorar una fotografía no es algo sencillo, que para eso tenemos que tener claro unos criterios.
Al observar e interpretar una fotografía, puede uno percibir elementos que no parecen aportar mucho, que distraen, composiciones que quizás no sean las que dejen más claro el mensaje interpretado, etc.
Pero esa es mi interpretación, mi visión personal, mi lectura subjetiva.
¿Todas esas cuestiones son errores?
En el retrato del pintor Francis Bacon de arriba, el fotógrafo Bill Brandt no sigue la «regla» de la mirada, no parece aprovechar ese recorrido visual, la imagen parece inclinada por la farola, el encuadre y la composición son extraños… ¿eso son errores?
No. Sencillamente era lo que quería transmitir el fotógrafo y usó los recursos visuales necesarios para transmitir esa sensación.
Entonces, ¿no hay errores?
Sí, pero lo que distará que sea un error cualquier cuestión en una imagen, será que apoyo o no lo que desea transmitir el fotógrafo:
- Un horizonte caído no es un error si quieres dar sensación de inestabilidad o movimiento.
- Un horizonte caído puede ser un error si quieres transmitir sensación de calma y estabilidad.
¿De das cuenta?
El problema no son los recursos visuales que empleas, si no si apoyan o no lo que quieres transmitir 😉
Interpretar imágenes de los grandes maestros
En ocasiones también me llegan comentarios sobre las fotografías de los grandes maestros:
- … Pues a mi no me acaban de convencer las imágenes de tal fotógrafo tan reconocido…
- … ¿Y por qué esas fotografías son consideradas obras de arte? Yo no acabo de ver nada especial…
Estos son ejemplos del tipo de comentarios al que me refiero.
¿Qué suelo contestar?
Pues explico que aquí entran en juego varios factores:
- Nos falta cultura visual, nos cuesta decodificar adecuadamente las imágenes, de eso trata este artículo 😉
- Además, no solemos dedicar el tiempo necesario a la observación para hacer una lectura sosegada y meditada. Tienes que hacer ese ejercicio intelectual.
- Un fotógrafo es considerado un maestro no por una fotografía, si no por una obra fotográfica. La mayoría de las veces, las fotografías de estos maestros están incluidas en grandes proyectos fotográficos. Sea a partir de sus proyectos o de su obra entera, ese fotógrafo fue, o está siendo, capaz de plasmar una visión propia en sus creaciones. Digamos que desde su perspectiva, su obra ha aportado algo interesante a la fotografía.
- Sin embargo, no tiene por qué gustarte la obra de todos los fotógrafos, es más, lo normal es que te guste más un determinado tipo de fotografía, aquella con la que más te identificas.
- Y por último, ¿qué hace que algo sea una obra de arte? La respuesta no es fácil.
Ya trataré más adelante en el Blog aspectos sobre fotografía y arte, pero por adelantar algo al respecto, creo que hay 3 conceptos distintos:
- Lo que yo entiendo que es algo artístico, que me toca por dentro, que me hace sentir algo o veo que aporta algo interesante y le otorgo esa cualidad. Es algo personal.
- Lo que la gran mayoría de personas con un cierto conocimiento en la materia, expertos, críticos de arte, etc. pueden considerar que es arte.
- Lo que todo el entramado cultural y comercial de críticos, galerías de arte, mercado de obras de arte, etc. considera que es merecedor o no de ello.
¿Toda fotografía es una obra de arte? Pues estarás de acuerdo conmigo en que no.
¿Cuales lo son? ¿Debe preocuparte este tema cuando estás aprendiendo fotografía?
Mi consejo es que disfrutes haciendo fotografías y te esfuerces en conocer el lenguaje visual y en expresarte de la mejor forma posible mediante la fotografía.
No creo que te aporte mucho en ese proceso, preocuparte por si tus creaciones son artísticas o no.
Este tema da para hablar mucho, pero eso ya en otra ocasión 😉
Resumen
La correcta lectura de una imagen lleva un tiempo y supone un esfuerzo intelectual.
Igual que no se aprende a leer o a escribir el lenguaje verbal de la noche a la mañana, aprender a leer de forma adecuada las imágenes lleva su tiempo.
Tienes que alfabetizarte visualmente.
Como ya te he comentado, la labor del fotógrafo es conocer el lenguaje visual para codificar adecuadamente sus imágenes y poder transmitir lo que busca.
Tu labor está decodificar bien ese mensaje conociendo el lenguaje visual.
Dominar el lenguaje visual será bueno para que puedas disfrutar más de la fotografía y conseguir mejores imágenes.
[bctt tweet=»La lectura de fotografías es algo que puedes/debes ir aprendiendo para después aplicarlo en tus creaciones» username=»theimagen»]
Esfuérzate en la lectura y no te quedes en lo evidente, como nos dice Donis A. Dondis en el libro que ya te he citado: “El visionario no se detiene ante lo evidente; ve más allá de los hechos visuales, llegando a reinos mucho más vastos de significado”.
Eres un fotógrafo, preocúpate y mucho, por lo visual 😉
Referencias
Libros:
- La sintaxis de la imagen. Donis A. Dondis. Ed. Gustavo Gili Diseño
- Cómo leer una fotografía. Richard Salkeld. Ed. Gustavo Gili
- La cámara lúcida – Roland Barthes
- Lea este libro si desea tomar buenas fotografías. Henry Carrol. Ed. Blume
Lourdes dice
Me da gusto que continúes escribiendo y dando consejos,
Alguien como tú, no dejará de escribir.
Buen artículo después de un largo tiempo. (Vacaciones).
Este es uno de los mejores blogs de lectura fotográfica que tengo.
En hora buena, adicto a la fotografía. Gracias por compartir!!!
Braulio dice
Hola Lourdes :),
¡Vaya, qué alegría me dan comentarios como el tuyo! Me alegro mucho que te guste el Blog y sea uno de tus preferidos 😀
Muchas gracias por tus amables palabras y tu comentario, me ayudan mucho a seguir.
Un abrazo,
Braulio
Pedro dice
Me recomendastes en tu email la lectura de este pequeño articulo y la verdad es wue tiene mucha profundidad y has demostrado que eres un maestro tanto fotograficamente como a la hora de exponer este complejo tema. Gracias tambien por ayudarnos a interpretar la compleja realidad de una imagen.
Creo wue ta te voy entendidiendo cuando aconsejas aprender cultura visual.
Seguire aprendiendo con los enlaces referidos.
Da gusto leer tu blog y hacernos las cosas mas sencillas.
Braulio dice
Hola Pedro 🙂
No sabes lo que me alegra que te guste el artículo que te recomendé. Sin duda es un tema complejo, que necesita tiempo y dedicación, pero ya estás en el camino, que es lo que importa.
La cultura visual nos sirve para entender mejor las fotografías y expresarnos mejor con nuestras fotos, creando así mejores fotografías. Esto es válido para cualquier otra disciplina, ganar cultura literaria te hará un lector con más criterio y un mejor escritor.
Muchas gracias por tus amables palabras sobre el Blog y mi forma de tratar las temáticas 🙂
Gracias también por estar ahí, al otro lado.
Un abrazo,
Braulio