¿Quieres que tus fotografías ganen en interés? Pues debes mostrar con total claridad el centro de interés en las mismas. El centro de interés tiene que dejar claro de qué va tu fotografía.
El centro de interés es el elemento que más destaca, o que queremos destacar, en una fotografía. Por lo tanto, antes de hacer la foto tenemos que saber qué es lo que queremos captar. Si no es así ¿de qué va nuestra fotografía? ¿de qué estamos hablando?
Viendo la fotografía de arriba ¿tienes dudas de qué habla? Creo que no. Habla de una niña, una niña con una sonrisa de bichillo, de la alegría de tu rostro. Esta fotografía se podría incluir en el género del retrato.
Naturalmente, el centro de interés no tiene que ser necesariamente el sujeto que esté en el centro de la foto ni el que ocupa la mayor parte en la imagen. Aunque eso sí, debe ser el protagonista de la imagen. Es el elemento alrededor de la cual gravitan los demás elementos de la composición y armonizan con él.
El observador ha de identificar inmediatamente el centro de interés por lo que ha de evitarse que un elevado número de elementos compitan por atraer la atención del espectador.
El OBJETIVO de mostrar con claridad este centro de interés es evitar que la mirada del observador se disperse por toda la imagen.
Como ya te he dicho, el centro de interés no es el elemento más cercano o más grande, el centro de interés es una zona de la imagen que puede ser destacada por:
- Nitidez. Haciendo que la zona enfocada de la fotografía recaiga en el Centro de interés.
- Contraste. Que las tonalidades del centro de interés y el resto de la escena.
- Color. Similar al anterior, pero se diferencia por color
El resto de elementos y el espacio alrededor del centro de interés pueden dirigir la atención hacia el centro de interés mediante caminos visuales. Pueden ayudar a que se localice todavía mejor el centro de interés. Aquí las líneas, y otros elementos juegan un papel fundamental.
Sé creativo con el centro de interés
Y no te conformes con mostrar siempre tu centro de interés de la misma forma, puedes ser creativo a la hora de mostrarlo.
Esconde tu centro de interés
Si en lugar de mostrar claramente nuestro centro de interés, lo mostramos sólo en parte o incluso lo ocultamos, pero de alguna forma dejamos ver que está ahí, nuestras fotografías ganarán en interés.
Un ejemplo puede ser una sombra, que en la fotografía veamos una sombra, no el elemento que produce la sombra. Esa sombra será una especie de centro de atención, pero no se mostrará el elemento principal que produce esa sombra. Algo que a hacer que el observador se quede más tiempo en la fotografía, preguntándose por las partes que faltan.
A modo de ejemplo, sirva esta fotografía que realicé hace tiempo de una pareja, en concreto somos Mayte y yo 😉 .
Juega con un centro de interés inesperado
Otra forma de ser creativo con el centro de interés es intentar engañar al observador intentando que su mirada recaiga sobre un elemento que parece tener más peso visual, pero que no es así, no es el peso de la fotografía.
Mira el ejemplo más abajo, por contraste parece que el peso al principio recae en la persona del fondo, pero no es así, el centro de interés nos lo encontramos en el primer plano, ¡cuidado! 😉 .
Puedes incluir varios centros de interés
Este consejo no es para novatos, o digamos hay que tener especial cuidado al incluir varios centros de interés. Se debe tener un cierto dominio compositivo, ya que si no unos competirán entre ellos, unos con otros.
En el caso de incluir varios centros de interés sólo uno debe predominar en tamaño, y algo que suele funcionar bien es situarlos opuestos en nuestro encuadre, creando una diagonal visual.
Si logramos dominar esos centros de interés para que no compitan y sumen, puedes conseguir contar más cosas con tus fotografías, algo que siempre es recomendable.
Pero como te digo es mucho mejor intentar mostrar un sólo centro de interés y poco a poco ir probando otras propuestas más arriesgadas.
Conclusión: piensa y dispara
Tus fotografías ganarán mucho si dejas claro de qué van, el centro de interés. Por lo tanto debes pensar antes de disparar, debes ver si en tu visor o en el LCD de tu cámara aquello que quieres mostrar se está mostrando con total claridad.
Si no es así, no te preocupes, acercate, cambia el ángulo, utiliza otra focal… ¡busca mostrar con claridad aquello que estás fotografiando!
¿Qué te parece? ¿crees que es interesante mostrar el centro de interés? ¿el algo que sueles hacer en tus fotografías? Díme que opinas en los comentarios del artículo. Y si te ha gustado la entrada te agradecería mucho que la compartas.
Antonio dice
Como siempre muy interesante el artículo que publicaste…. Aunque es algo básico y que más o menos hacemos por intuición, conocer cómo afectan los diferente tipos hará que seamos más conscientes al realizar las fotografías….
En cuanto a este tema de los centros de interés, me ha surgido una duda tras leer este artículo… Estamos acostumbrados a realizar la típica foto en la que sacamos un paisaje o monumento y en ella tenemos a una persona que queremos que salga, ¿no crees que esas fotos pueden ser nuestras peores fotos? Me refiero a que nos empeñamos a intentar sacar a la persona en medio de un paisaje muy bonito y al final desviamos los focos de interés (uno a la persona y otro al paisaje). ¿Qué piensas al respecto?
Gracias por anticipado.
Braulio dice
Hola Antonio, gracias por tu comentario.
No estoy tan deacuerdo en que sea algo que hacemos por intuición. Por intuición sabemos cuál es nuestro centro de interés, pero el espectador no tiene por qué saber cuál es ese centro y la cámara no discrimina, debemos ser nosotros, con los medios fotográficos, los que dejemos claro el centro de interés a los espectadores.
Respecto a la pregunta, depende de qué queramos mostrar, ¿qué quieres mostrar? ¿el paisaje? entonces no es necesaria la persona ¿A la persona en el contexto? Pues deja claro cuál es el centro de interés, la persona, hazlo por tamaño, por color, etc. Una foto a una persona en un paisaje es algo más documental que otra cosa ¿no te parece?
Espero haberte contestado 😉
Un saludo,
Braulio