A través de este episodio me gustaría que perdieses el miedo a usar el flash de tu cámara. ya que es muy posible que lo hayas usado alguna vez y no te haya gustado el resultado. Vamos a ver porque ocurre esto y cómo solucionarlo.
Más información, ejemplos, etc. en el Blog: https://www.theimagen.com/superar-miedo-al-flash/
En el episodio repaso porque no suele gustar mucho la luz que genera el flash incorporado en tu cámara, y esto es básicamente por dos razones.
La primera es que genera una luz muy frontal que no ayuda a nuestro ojo a distinguir los volúmenes, la textura, y que nos resulta extraña.
La segunda es que produce una luz muy dura, que provoca sombras muy marcadas, algo que tampoco resulta muy favorecedor.
La solución pasaría por disponer de un tamaño de la fuente de luz más grande y por poder cambiar la dirección de la luz, para que no siempre sea frontal ¿Cómo hacerlo? Pues la solución más sencilla y funcional es mediante un flash de mano, también llamado flash externo.
En este episodio no se habla de cómo usar el flash de mano, ya que es algo que veremos en otros episodios más adelante. Y aunque el flash externo aporta muchas soluciones, su luz directa también es muy dura. Para eso hablo de la técnica del rebote, que consiste en disparar el flash no hacia la escena, si no hacia una superficie donde se rebota la luz y así se consigue aumentar el tamaño de la fuente de luz.
Puedes ver ejemplos en Blog: https://www.theimagen.com/superar-miedo-al-flash/
También comento lo interesante que supone separar el flash de la cámara, algo que ya veremos en profundidad en próximos episodios.
En el artículo del Blog también hago una prueba casera para mejorar la luz generada por tu flash integrado ¡algo casero que funciona!
Espero que con este episodio hayas podido comprender por qué el flash de tu cámara está limitado y te haya picado la curiosidad de usar un flash de mano.
¿Qué te ha parecido este capítulo? ¿Tienes dudas, sugerencias, etc.? No dudes en dejarme un comentario, te estaré muy agradecido y encantado de poder ayudarte. Y si dejas un “Me gusta” en Ivoox, tu valoración en iTunes, te suscribes al canal o compartes en las redes este Podcast seguro que me sacas una sonrisa de oreja a oreja 🙂 .
¡Gracias por estar ahí y nos vemos en el próximo capítulo!
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